Divulgación oftalmológica

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La genética no solo decide el color de tus ojos

La genética no solo decide el color de tus ojos

Cuando hablamos de genética tendemos a pensar únicamente en esos rasgos que heredamos de nuestros padres, abuelos, hermanos… Y no es que esto sea un error o una creencia popular, para nada, es una parte más de los valores que aporta nuestro ADN a nuestra forma física. Así que sí, ese lunar en la barbilla, justo como el que tiene tu abuelo, ha dejado su huella en tu cadena genética y por eso tú también lo tienes. Hasta ahí todo puede parecer bonito, idílico, pero nuestro ADN también nos puede jugar malas pasadas.

¿Malas pasadas?

Claro, de la misma forma que has sacado el lunar en la barbilla o ese color negro intenso de tus ojos, también puedes heredar ciertos patrones genéticos que te hagan más propenso a padecer ciertas enfermedades. Es por eso que cuando acudes a la consulta de un especialista, como es nuestro caso, planteamos una serie de cuestiones pertinentes que nos pueden ayudar detectar y prevenir ciertas patologías. Cuando acudes a nuestra consulta para una revisión y detectamos ciertos patrones que nos indican el desarrollo potencial de alguna enfermedad determinada, nos gusta preguntarte algunas cosas que nos pueden ayudar a determinar mejor qué es lo que te pasa.

Además, muchas veces esto puede ser el principio de un tratamiento combinado en el que deban participar otros especialistas. Por ejemplo, nos interesa mucho saber si tienes familiares directos, consanguíneos, como tus padres, hermanos o abuelos que tengan diabetes. ¿Por qué nos interesa? Pues porque la diabetes tipo 2 tiene un alto componente genético y esto, si no se previene, puede provocar la aparición de otras patologías como la retinopatía diabética. Esta enfermedad afecta a la retina, membrana sensible a la luz, y provoca que los capilares que deben nutrirla se vean afectados por los niveles de azúcar y estos no puedan cumplir su función. Si dicha patología no es tratada adecuadamente puede ocasionar graves problemas en la vista.

El glaucoma

Una vez identificada esta carga genética. ¿Qué podemos hacer? Pues en el caso de la diabetes debes saber que tus hábitos de vida también juegan un papel fundamental si queremos retrasar su posible aparición. De ahí que te recomendemos siempre llevar una dieta sana. Pero si dado el caso, la diabetes ya esta instaurada, nos toca abordar la enfermedad desde una perspectiva global en la que, seguramente, habrá que incorporar la valoración de otros especialistas. La diabetes naturalmente, no es la única enfermedad ligada a la influencia de tu ADN. Existen otras, entre las que destaca el glaucoma. Esta afección es provocada por la excesiva tensión intraocular, que provoca lesiones en el nervio óptico, es decir, en la «fibra óptica» que trasmite la información a nuestro cerebro y cuyo buen estado es fundamental para poder ver. La alta presión intraocular (PIO) afecta a su normal funcionamiento. De ahí, que nos interese saber si existen casos en tu familia de uso prolongado de tratamientos en forma de colirio y/o mala visión o ceguera motivados por dicha patología, ya que esto nos puede ayudar a entender por qué tu PIO es alta para, a partir de ahí, establecer pautas que nos ayuden a controlarlo.

Tal vez estas sean las dos patologías que como médicos especialista en la vista más nos puedan preocupar, ya que de no ser atajadas a tiempo pueden provocar lesiones irreversibles. Pero, no son las únicas. También nos toca hablarte de daltonismo. Seguro que esta sí que te suena, ya que todos en algún momento hemos dicho eso de: “no ves que eso es rojo, estás daltónico”. Pues sí, de eso se trata, de no saber diferenciar determinados colores. Y sí, esto también tiene que ver con la estructura de tu ADN. Si tu padre es daltónico tú tendrás más probabilidades de serlo, aunque también debes saber que existe un daltonismo adquirido, es decir, sin causa hereditaria.

Por último, no queremos terminar este post sin mencionarte otra patología con fuerte carga genética: el nistagmo. ¿Qué qué es esto? Pues se trata de movimientos involuntarios, generalmente pendulares, de los ojos. Y por supuesto, influye directamente en la percepción de nuestro entorno.

En definitiva, en el Instituto Oftalmológico Amigó siempre tratamos de entender qué te pasa de una forma integral, con el objetivo de ofrecer un servicio especializado y completo. De ahí que creamos firmemente en la necesidad de elaborar un amplio expediente médico en el cual incluiremos información sobre enfermedades o características de tus familiares directos. Para que entiendas mejor la complejidad y la importancia de la carga genética no te olvides de consultar los links que hemos colocado en este post. De esta forma podrás hacerte una idea de su importancia.